Cada vez más, la tradicional separación entre empresas y/o entidades financieras y compañías de seguros está siendo superada y los grandes conglomerados financieros operan en todos los sectores del mercado ofreciendo a su clientela todo tipo de productos de ahorro, de riesgo, de crédito, etc. Esto conlleva que los diferentes riesgos y su tratamiento, objetivo de los estudios Actuariales, no sea un fenómeno parcelable sino único con instrumentos comunes de gestión. En consecuencia, resulta necesario formar profesionales capacitados en el campo financiero, con sólidos conocimientos de cálculo financiero estocástico, activos y mercados financieros, banca, gestión de carteras, gestión de riesgos financieros, etc., además de en las áreas específicamente aseguradoras como la previsión social, seguros de vida y no vida, reaseguro o las cuestiones más novedosas como las prestaciones de salud y dependencia.