Máster Oficial en Neurociencia y Educación

La neurociencia se concibe como aquella disciplina que persigue conocer el funcionamiento y la estructuración del sistema nervioso, así como sus implicaciones en nuestras conductas, pensamientos y emociones. Más concretamente, podemos decir que la neurociencia cognitiva es la encargada de relacionar el binomio mente-cerebro.

Del vínculo establecido entre neurociencia y ciencias de la educación nace la neuroeducación. En este sentido, podemos definir la neurociencia educativa como la disciplina que se dirige a descubrir cómo aprende el cerebro para incentivar la mejora de las estrategias y de los procesos de enseñanza.

Desde este prisma, el aprendizaje ha de ser concebido como un conjunto de elementos mediados por factores externos de carácter social o no y factores internos. De esta manera, resulta fundamental analizar y estudiar el papel que presentan los procesos de memoria y atención, motivación, metacognición, empatía y experiencia emocional en el aprendizaje.

No cabe duda de que la neuroeducación no está lejos de convertirse en una herramienta imprescindible de mejora del proceso de enseñanza-aprendizaje.

Cada cerebro es una obra única que se perfila mediante la experiencia, la educación y el entrenamiento sistemático. Cualquier estudiante es capaz de mejorar y de aferrarse al aprendizaje, siempre y cuando se realicen propuestas educativas basadas en las particularidades y los ritmos de aprendizaje individuales. De hecho, tal y como se afirma desde el propio Ministerio de Educación, Cultura y Deporte, está demostrado que los centros educativos en los que los equipos directivos, los de orientación psicopedagógica y los docentes conocen y aplican la neuropsicología obtienen mejores resultados, previenen las dificultades del aprendizaje y mejoran el rendimiento escolar.