Ante los retos educativos que implican construir nuevos proyectos de convivencia en el marco de un contexto de crisis global, la educación en valores y ciudadanía adquiere una relevancia máxima, ya que debemos aprender a ser y a convivir en sociedades multiculturales, globales e interconectadas.
La situación actual de crisis ha puesto en cuestión valores fundamentales de la ciudadanía democrática y la cohesión social. La globalización y las redes sociales plantean también nuevos retos en la configuración de las identidades, de modo que en la actualidad, la identidad digital coexiste con identidades personales y sociales vinculadas al territorio y a las culturas.
Tanto desde una perspectiva microscópica ´con la que se detecta una preocupación generalizada por la denominada crisis de valores´ como desde una perspectiva macroscópica, nos encontramos ante una problemática, tan antigua como renovada, que reclama la atención de la investigación socioeducativa y de la acción de los profesionales de la educación.